El bingo se convirtió en un juego bastante popular a lo largo de los años, lo cierto es que puede que las generaciones más jóvenes no sepan cómo se juega.
El bingo es uno de los juegos de azar más famosos en todo el mundo. Es bastante fácil de jugarlo, recuerda mucho a una lotería y lo cierto es que se puede practicar tanto en casa como en locales de juego o mini casinos.
¿Cómo se desarrollan las partidas de bingo?
El bingo está compuesto por un bombo con las 90 bolas que contienen los números que tendremos que ir tachando de un cartón en el que suele haber total de 15 números que se disponen en tres filas de cinco números cada una.
- La partida arranca con todos los jugadores con su cartón adelante y un bolígrafo o marcador en mano para ir tachando.
- Una persona se encarga de darle vueltas al bombo, y sacar una bola de la que tiene que decir en voz alta el número (en el caso de ser automatizado, la bola sale sola tras varias vueltas).
- Los jugadores que tengan el número cantado en su cartón, lo tienen que tachar.
- El jugador que tache los cinco números de una línea tiene que decir «Línea» y será premiado con el bote que se haya destinado para la «Línea».
- Una vez que se cantó «Línea» el juego prosigue. El jugador que vuelva a completar una fila de las tres que tiene puede decir «Línea».
- El jugador que logre tachar todos los números de su cartón, tiene que decir en voz alta «Bingo» y cobrar el bote asignado.
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